jueves, 23 de mayo de 2013
En tiempos de crisis, celebrar con economía es la clave!
Me encantan los blogs de manualidades, siempre se encuentran cosas fascinantes que hacer, a veces con materiales que tenemos en casa. Como estoy en los preparativos de la Primera Comunión de mi hija mayor, me he dedicado a buscar y las ideas no son cientos, sino miles, de lo que se puede hacer en relación a las invitaciones, decoración, la comida, los recuerditos etc. En cuanto al primer punto, hemos decidido colaborar, ser mas amigables con nuestro medio ambiente y ahorrarnos además del dinero en papel y tinta, el tiempo en salir a repartir las invitaciones, por lo que se enviaron por correo electrónico: sencillas, muy originales, hechas por nosotros mismos, sin necesidad de recurrir a un experto en diseño gráfico o algo por el estilo. Ya la modalidad la aplicamos con las invitaciones al Bautizo de nuestro hijo menor y gustó bastante entre nuestros familiares y amigos. Para el tema de la decoración me he guiado por estos blogs manualistas que me han enseñado a hacer unos fáciles, divertidos y muy lucidores pompones de papel de seda, así que por allí también nos estaremos ahorrando un dinerillo. En cuanto a la comida fue difícil ponernos de acuerdo, hablar de lo costoso que resulta un buffet con un menú mas o menos decente para un almuerzo está demás, particularmente por el altísimo costo de la vida en nuestro país actualmente (lamentablemente es así), de manera que haremos un brindis y un sencillo compartir con té y pasapalos salados y dulces en casa. Mi hija eligió ponquecitos o cupcakes en lugar de la tradicional torta, aparte de que están de moda en cualquier celebración, nos evitamos la picada del pastel y todos tienen raciones exactamente iguales!!!, cada quien toma su porción y ya. Tenemos la fortuna de contar con unas tías hermosas en Ecuador (tías maternas de mi esposo) que tuvieron el gesto enorme de fabricarle a la nena su vestido de Primera Comunión y los recuerditos, MILLONES DE GRACIAS!!!! Pero, para quienes no tienen esa suerte, he visto que hay quienes usan los cupcakes envueltos en papel celofán, con una tarjetita y cinta para entregar a sus invitados. Las opciones son infinitas, así como nuestra creatividad al momento de complacer a nuestros hijos sin ir detrimento de la economía familiar. Lo principal es, en este tipo de celebraciones religiosas, acompañar y celebrar con nuestros hijos este gran acontecimiento, interiorizando en familia el momento y su significado para el resto de la vida. La emoción por vivir con mi familia, especialmente con mi hija este Sacramento es indescriptible!!!!! Manos a la obra y a poner todo en el nombre de Dios!!!
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